
Refrescar la memoria
Descripción
Tal vez parezca un poco ordinario citar un programa de Telecinco, pero ¿qué queréis que os diga? Una no lleva una vida como la de Michel de Montaigne y tal vez la crítica pueda aprender algo del reflejo social que nos devuelven estos programas.
Total, nos situamos: Supervivientes 2020. El programa arranca el 20 de febrero. El coronavirus era aún una cosa geocontenida en Asia en los medios españoles. El famoso partido de fútbol del que poquito se ha hablado (y mira, sinceramente, ¿pa qué?) y que aceleró la pandemia en Europa a través de Italia, se celebró el 19 de febrero y sus efectos tardarían aún días en apreciarse. Como en todo reality, los concursantes no tenían noticias ni contacto apenas con el mundo exterior. Les dijeron que la cosa se estaba poniendo fea en España, pero prácticamente pasaron la primera ola de la pandemia en unas playas paradisiácas (Alba Álvarez, precioso discurso de cierre, por cierto).
El caso es que no sé muy bien a raíz de qué (¿expulsión? ¿momento televisivo de reacción ante la revelación de una verdad?), el programa reproduce un vídeo sobre la pandemia a una de las concursantes, Elena Rodríguez, mientras graban (obviamente), su reacción. El vídeo contiene fragmentos de informativos telecinco ordenados cronológicamente sobre la evolución de la pandemia en España. No importa cuántas veces veas el vídeo: siempre lo revives todo como si lo visualizaras por primera vez desde la perspectiva de la propia Elena. No deja de asombrar, de estremecer y de resultar tan propio a la vez que castigado por la desmemoria.
Claro, el vídeo se corta en un cúlmen de solidaridad, y no menciona las caceroladas, las manifestaciones de carros abanderados ni las del barrio Salamanca. Tampoco los sucios bloqueos políticos a las sucesivas renovaciones al estado de alarma, ni a la perversa manipulación discursiva de la realidad por parte de la esfera política. Pero quizás esas cosas sea mejor, de hecho, olvidarlas.
Viendo de nuevo el vídeo con mi pareja (quien tampoco vivió la pandemia en España), señaló que en realidad estaba diseñado para provocar una respuesta emotiva (él, robot). Y, obviamente sí, pero a la vez ¿es posible un resumen cronológico de estos días históricos que no provoquen una respuesta emotiva? Precisamente, son respuestas emotivas lo que necesitamos. Las medidas no se respetan, la información científica se cuestiona y la concienciación parece más un mantra (hay gente que se cree más lista que nadie y de aquí te saca una teoría de la conspiración) de medidas de higiene. No es posible involucrar a la población en el cuidado de todxs sin involucrarla emocionalmente.
Y por eso, pese a todas las críticas culturales que podamos a hacer a la telerealidad y Telecinco, recomiendo encarecidamente que veamos el vídeo en el que Elena Rodríguez se entera de lo sucedido en España. Por refrescar la memoria.